En el día Internacional de la Mujer: Un homenaje a "las Edemburgo"

Cuando miro hacia atrás, me gusta hacerlo para brindar respeto y honrar a las personas que han tenido una participación clave en los procesos de mi vida, especialmente a los seres que han formado parte de mi Sistema Familiar.

En ese estado de reflexión, además de observar las ideas, creencias y hábitos que he heredado, algunas de ellas limitantes, otras inspiradoras y fascinantes, me doy cuenta de que aún cuando las experiencias no hayan sido del todo satisfactorias… todo fue perfecto y lo que ocurrió tenía que ser de esa manera… porque así fue como llegué a espacios que me permitieron avanzar en este camino de aprendizaje que no tiene fin.

En definitiva… Nuestras relaciones con los demás están al servicio de nuestro autodesarrollo personal… y no al revés. Rafael Vidac.

Es por ello que dedico este Blog, a las maravillosas mujeres que han tenido una marcada influencia en mí, María (Mamá), Rosalba (Tía Materna), Rosa (Abuela Materna) y Gladys Edemburgo (Tía Materna). Todas con diferencias en personalidad y esencia, pero con coincidencias que he querido se sigan modelando en mí: valores, organización, destrezas culinarias, máximo aprovechamiento de los recursos, gusto por embellecer los espacios que se habitan y muchas otras formas de expresión de amor a uno mismo y a los que nos rodean.

Rosa y Gladys Edemburgo: Expertas costureras y cocineras. Gusto por el café recién colado, la belleza de las flores y muy especialmente por los viajes y la diversión.

Rosalba y María Edemburgo: Dulces y cariñosas. Especialistas en hacer magia con los recursos que disponían. Amantes de las flores y por supuesto de un buen café recién colado.

De ellas, sólo Mamá sigue con nosotros y como he aprendido que la energía no muere, sino se transforma, desde acá les envío todo mi amor y toda mi gratitud.

Te invito a que honres a tus antepasados, a tu Sistema Familiar, porque gracias a ellos dispones de lo más importante que tenemos los seres humanos… ¡La Vida!